Contribuyendo a la aplicación efectiva del nuevo paradigma de salud mental, el Presidente del Consorcio de Gestión del Puerto Quequén, Jorge Alvaro, firmó junto al Ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, un convenio para la construcción de dos casas de externación y un local comercial para venta de productos del emprendimiento productivo de usuarios y usuarias del Hospital Subzonal Especializado Neuropsiquiátrico “Dr. Domingo J. Taraborelli”, ubicado en Necochea.
El Ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la Provincia de Buenos Aires, Augusto Costa, destacó que se trata de un paso importante en el marco del nuevo paradigma, y una experiencia muy buena para apoyar desde Producción.
El Presidente del Consorcio, Jorge Álvaro, señaló “que es un sector de la sociedad que raramente observamos. Mi compromiso es hacerlo y estar licitando para fin de año, para que dentro de un año y medio las obras estén terminadas”.
Participaron de la firma, el ministro de la Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa; la subsecretaria de Salud Mental, Consumos Problemáticos y Violencia de Género, Julieta Calmels; la subsecretaria Técnica, Administrativa y Legal, Victoria Anadón; el subsecretario de Asuntos Portuarios bonaerense, Juan Cruz Lucero; el director Provincial de Salud Mental y Consumos Problemáticos, Mariano Rey; y el director Ejecutivo del hospital “Taraborelli”, Carlos Gallego.
“Que el Puerto y el ministerio de Producción puedan dar una mano para ayudar en algo tan sensible como la Salud, sobre todo los sectores más necesitados, nos enorgullece y les agradecemos”, dijo Kreplak, y a la vez, felicitó “al enorme trabajo que se viene haciendo en el hospital”.
Calmels, por su parte, señaló que las obras forman parte del proyecto de reforma integral que el hospital elaboró y que fue aprobado por el ministerio de Salud en diciembre del año pasado, junto con el resto de los hospitales neuropsiquiátricos bonaerenses. “Esos proyectos tienen elementos sanitarios y elementos que tienen que ver con proyectos de vivienda, culturales y socioproductivos; entendiendo que la transformación que tenemos que hacer de la vida de esas personas involucra al sector salud, pero también a otros sectores”.
En ese marco, continuó Calmels, “encontramos la posibilidad de que el Puerto pueda hacer un aporte social dentro de su comunidad, a partir de la construcción de dos aportes sustanciales: dos viviendas para la externación de usuarios que no tienen criterios para estar internados y a la vez un tercer aporte, que es la construcción de un local para producción y venta de productos que el hospital viene trabajando, y así trabajar la inserción en el trabajo”.
